8 de Marzo
Otro año y otro ocho de marzo en el que miles de mujeres saldrán a la calle y participarán en actos para recordarnos que en el hecho diario las mujeres siguen sin ser unas trabajadoras más, siguen cobrando menos que los hombres al realizar un mismo trabajo, siguen teniendo muchos más vetos para alcanzar puestos de responsabilidad, siguen teniendo que superar día a día una barrera invisibl que le dificulta alcanzar un puesto de trabajo por la mera posibilidad de que, en cualquier momento, quede embarazada o que pueda faltar a su puesto en alguna ocasión para atender alguna necesidad de sus hij@s. El ocho de marzo volveremos a leer en los periódicos y veremos en los telediarios secciones en la que nos recordarán todos estos datos avergonzantes, y después dejaremos en manos de quienes establezcan las normas y legislan el hecho de se establezcan normas y leyes para salir de este estado de desigualdad. Pero, que no se nos olvide, los hombres somos casi la mitad de la población y hasta que no nos concienciemos, nos identifiquemos con nuestras compañeras y luchemos junto a ellas, el patriarcado sexista y machista seguirá perpetuándose. Mientras que no luchemos por la equiparación de los permisos de paternidad y de maternidad y luego ejerzamos dichos derechos, así como la toma de días de asuntos propios para ocuparse de l@s hij@s, la maternidad seguirá siendo un obstáculo para el desarrollo profesional y personal de la mujeres. Mientras que no abochornemos en público a los compañeros que hacen comentarios sexistas o vejatorios hacia la mujeres, y en nuestros lugares de trabajo los vestuarios y baños sigan forrados de imágenes pornográficas de mujeres, no se desligará la visión de la mujer trabajadora como posible objeto sexual. Mientras que nos siga pareciendo extraño ver a una mujer electricista o a un hombre siendo educador infantil, no nos liberaremos de la división sexista de los puestos de trabajo. La discriminación sexista no es un problema de las mujeres trabajadoras, nosotros, los hombres, con nuestras actitudes y acciones somos su problema. Por desgracia todos los sacrificios y la lucha de las mujeres trabajadoras, sus grandes logros y la escalada en derechos seguirán siendo insuficientes mientras que nosotros no cambiemos.
VIVA LA LUCHA DE LA MUJER TRABAJADORAS
Manifestación a las 19 h. de Cibeles a la plaza españa